Digno Es El Cordero

## Apocalipsis 5:1–7 y la revelación de la voluntad de Dios Descargar PDF En Apocalipsis 5:1-7, nos sumergimos en una dramática escena celestial centrada en un libro sellado y en el único digno de abrirlo. Este momento marca un punto de inflexión en la visión que recibe Juan: una declaración teológica y cósmica de que, a través de Jesús, el plan de Dios se pone en marcha y la historia avanza hacia su culminante cumplimiento. # El libro en la mano de Dios: La voluntad de Dios La visión comienza con un libro “escrito por dentro y por fuera, sellado con siete sellos” (Apocalipsis 5:1). Este libro, que reposa a la diestra de Dios, representa nada menos que la voluntad de Dios: su plan redentor y propósito soberano para la historia. El hecho de que el libro esté sellado subraya su carácter sagrado y autoritario. Su contenido permanece oculto hasta que el Señor lo revele. Hay buenas razones para entender el libro como una especie de testamento legal, como **Hebreos 9:16–17** explica: “...Porque donde hay testamento, es necesario que intervenga muerte del testador..” La muerte de Cristo activa esta voluntad divina, y su resurrección asegura que sólo Él es digno de revelar y ejecutarla. # La naturaleza omniabarcante de la voluntad de Dios: La escritura a doble cara del libro indica que el plan integral de Dios, sin lugar para añadidos humanos, es sólido. Esto se alinea con el tema bíblico de la soberanía de Dios sobre la historia. Por ejemplo: **Isaías 46:9-10:**“Acordaos de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí, que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quiero”. El libro completamente escrito simboliza este propósito divino completo e inalterable. **Salmo 33:11:** “El consejo de Jehová permanecerá para siempre; Los pensamientos de su corazón por todas las generaciones.” El contenido exhaustivo del libro refleja este plan inmutable. **Ezequiel 2:9-10:** "Y miré, y he aquí una mano extendida hacia mí, y en ella había un rollo de libro. Y lo extendió delante de mí, y estaba escrito por delante y por detrás; y había escritas en él endechas y lamentaciones y ayes." La imagen de un libro escrito por ambas caras es poco común en contextos antiguos (la mayoría de los libros se escribían por una sola cara), lo que enfatiza su integridad. Ezequiel 2:9-10, donde un libro está escrito por ambas caras con palabras de “endechas y lamentaciones y ayes”, respalda la idea de un decreto divino integral. # Revelación parcial antes de Cristo: En segundo lugar, la escritura exterior podría ser parcialmente visible para un transeúnte casual (por ejemplo, profetas o ángeles), mientras que el contenido completo sólo es revelado por Cristo. Esto se enlaza directamente con el concepto neotestamentario del "misterio" del plan de Dios. **Efesios 3:4-6:** “Leyendo lo cual podéis entender cuál sea mi conocimiento en el misterio de Cristo, misterio que en otras generaciones no se dio a conocer a los hijos de los hombres, como ahora es revelado a sus santos apóstoles y profetas por el Espíritu: que los gentiles son coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio” Pablo describe el “misterio de Cristo”, que no se dio a conocer a los hijos de los hombres en otras generaciones, pero que ahora se revela a través de los apóstoles y profetas. La escritura exterior del libro simboliza lo que se vislumbra parcialmente en el Antiguo Testamento, mientras que el contenido interior, accesible solo al Cordero, representa la revelación completa del plan redentor de Dios a través de Cristo. **1 Pedro 1:10-12: “**Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos. A estos se les reveló que no para sí mismos, sino para nosotros, administraban las cosas que ahora os son anunciadas por los que os han predicado el evangelio por el Espíritu Santo enviado del cielo; cosas en las cuales anhelan mirar los ángeles.” Pedro escribe que los profetas «indagaron e indagaron diligentemente» sobre la salvación venidera, e incluso los ángeles “anhelan mirar” estas cosas. Los profetas y los ángeles tenían una visión parcial del plan de Dios (el “exterior” del libro), pero solo la obra de Cristo revela el misterio completo. **Colosenses 1:26-27:** ”El misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos, a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria” El “misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos” refuerza aún más que la venida de Cristo revela la voluntad completa de Dios. # La crisis cósmica y el llanto de Juan: Un ángel poderoso proclama: “¿Quién es digno de abrir el libro y desatar sus sellos?"**(Apocalipsis 5:2)** Pero nadie en el cielo, ni en la tierra, ni debajo de la tierra es considerado digno. La respuesta de Juan es llorar a gritos, señal de la gravedad del momento. Sin alguien que abra el libro, los propósitos de Dios no pueden cumplirse. Esta indignidad universal refleja la declaración de Pablo en **Romanos 3:23**: “por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.” y **Romanos 8:20–22:** "Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora.” La creación gime bajo el peso del pecado y la futilidad, y ningún ser humano o angelical puede desbloquear el plan redentor de Dios. # El digno: león y cordero Entonces llega el punto de inflexión: uno de los ancianos declara: **Apocalipsis 5:5:** “No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido...” Este título evoca **Génesis 49:9–10**, una profecía mesiánica de que el cetro no se apartará de Judá, y **Isaías 11:1**, donde el retoño mesiánico proviene de la raíz de Jesé. El león simboliza el poder real, la victoria y la autoridad. Pero cuando Juan se gira para mirar, ve **Un Cordero en pie, como si hubiera sido inmolado** (v. 6). El cambio de León a Cordero es una profunda paradoja teológica: el Mesías ha conquistado no mediante el poder militar, sino mediante la muerte sacrificial. Este Cordero inmolado, pero en pie, es Jesús, aquel a quien Juan el Bautista llamó: **Juan 1:29:** “el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” haciendo eco: **Isaías 53:7**: "Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca." donde el Siervo sufriente es llevado como un cordero al matadero. Pablo declara esta victoria en: **1 Corintios 15:54–57:** ”Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.” describiendo la resurrección de Cristo como triunfo sobre el pecado y la muerte. **Filipenses 2:8–11** “y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.” Esto resalta aún más que la obediencia de Jesús hasta la muerte conduce a su exaltación, un claro paralelo al Cordero siendo hallado digno de abrir el libro y recibir adoración. # Los atributos divinos del Cordero: siete cuernos y siete ojos Se describe al Cordero como alguien que tiene s*iete cuernos, y siete ojos, los cuales son los siete espíritus de Dios enviados por toda la tierra.*(Apocalipsis 5:6). Estos símbolos tienen un gran significado: **Cuernos:** Representan fuerza y ​​autoridad. Siete cuernos representan poder completo o perfecto. **Salmo 18:2:**El Señor es mi roca y mi castillo y mi libertador; mi Dios, mi roca en quien me refugio; mi escudo y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio. **Siete Ojos, los cuales son los siete espíritus de Dios**: se refiere a la plenitud del Espíritu Santo, indicando que el Cordero opera con el Espíritu en toda su plenitud. **Isaías 11:2:** "Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová." **Zacarías 4:10:** “Estos siete son los ojos de Jehová, que recorren toda la tierra.” Esta imagen presenta a Jesús no sólo como el digno ejecutor de la voluntad de Dios, sino como aquel que comparte la omnipotencia y omnisciencia divinas: plenamente Dios y plenamente capacitado para cumplir los propósitos de Dios. # Unidad Trinitaria La dinámica trinitaria se revela en Apocalipsis 5: el Padre (en el trono), el Hijo (el Cordero) y el Espíritu (los siete espíritus) obran juntos para ejecutar el plan de Dios. Esto apunta aún más que el libro es la voluntad integral de Dios, ejecutada mediante la autoridad de Cristo, dotado por el Espíritu. # El libro como herencia y juicio Si bien el libro funciona como la voluntad de Dios, también contiene la herencia prometida al Hijo. **Salmo 2:8:** “Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión tuya los confines de la tierra.” y los juicios asociados con la transición del Antiguo Pacto al Nuevo. La ruptura de los sellos revela, progresivamente, el cumplimiento de esta voluntad divina, que culmina en el pleno establecimiento del Reino de Cristo. Esto está en armonía con **Daniel 7:13–14:** “Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, y le hicieron acercarse delante de él. Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido.” Donde el Hijo del Hombre recibe dominio y un reino del Anciano de Días. La toma del libro por parte de Cristo refleja este momento: recibe el Reino como parte de la herencia otorgada mediante su muerte y resurrección. **Colosenses 1:20** refuerza esto: “por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz” # La inauguración del nuevo pacto Los siete sellos (Apocalipsis 6-8) se revelarán en etapas, revelando juicios (por ejemplo, los cuatro caballos, el martirio, el trastorno cósmico) que culminarán en la revelación completa del plan de Dios: la inauguración del Nuevo Pacto. **Mateo 24:6-8:** "Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores." El discurso de Jesús en el Monte de los Olivos describe las guerras, las hambrunas y los terremotos como “el comienzo de los dolores de parto”, lo cual es paralelo a los juicios de los sellos: estos eventos conducen hasta el año 70 d. C. y la destrucción de Jerusalén, lo que significa la transición del Antiguo Pacto al Nuevo. **Hebreos 8:13:** “Al decir: Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece, está próximo a desaparecer.” El antiguo pacto está obsoleto y a punto de desaparecer, lo que respalda la idea de que los sellos del Apocalipsis representan el establecimiento del Nuevo Pacto mediante el juicio sobre el antiguo orden. Cada sello revela un nuevo aspecto de cómo la victoria de Cristo transforma el mundo, culminando en la plena realización del Reino. **Lucas 22:20:** “Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.” Jesús describe la copa de la Cena del Señor como “el nuevo pacto en mi sangre”. Los juicios de los sellos son el resultado del establecimiento de este pacto, con la muerte y resurrección de Cristo permitiendo la transferencia de autoridad del antiguo orden al nuevo. En **Apocalipsis 21:5** la declaración: “He aquí, yo hago nuevas todas las cosas” refleja el resultado final de la apertura del libro: la inauguración del Nuevo Pacto. # Conclusión: ¿Por qué esto es importante? El capítulo 5 de Apocalipsis nos recuerda que los propósitos de Dios no se desarrollan al azar ni mediante la fuerza humana. Son revelados y ejecutados por el Cordero inmolado. Solo Cristo es digno. El llanto de Juan da paso a la adoración. Apocalipsis 5 nos invita a confiar en que el libro está en las manos correctas. Y esas manos fueron atravesadas por clavos.